Has elegido rechazar las cookies basadas en consentimiento que utilizamos principalmente para gestionar la publicidad. En adelante, para acceder a nuestra web tienes que elegir alguna de las siguientes opciones.
Premium
3,99 €/mes o 39,90 €/año
Sin publicidad y mucho más
Plus
Por 9,99 €/mes
Contenido exclusivo y sin publicidad
Si has cambiado de idea, puedes aceptar las cookies y continuar usando iVoox de forma gratuita.
Con tu consentimiento, nosotros y nuestros 813 socios usamos cookies o tecnologías similares para almacenar, acceder y procesar datos personales, como tus visitas a esta página web, las direcciones IP y los identificadores de cookies. Algunos socios no te piden consentimiento para procesar tus datos y se amparan en su legítimo interés comercial. Puedes retirar tu consentimiento u oponerte al procesamiento de datos según el interés legítimo en cualquier momento haciendo clic en ''Obtener más información'' o en la política de privacidad de esta página web.
Nosotros y nuestros socios hacemos el siguiente tratamiento de datos:
Almacenamiento y acceso a información de geolocalización con propósitos de publicidad dirigida, Almacenamiento y acceso a información de geolocalización para realizar estudios de mercado, Almacenar la información en un dispositivo y/o acceder a ella , Datos de localización geográfica precisa e identificación mediante análisis de dispositivos , Publicidad y contenido personalizados, medición de publicidad y contenido, investigación de audiencia y desarrollo de servicios , Uso de cookies técnicas o de preferencias.
Comentarios
no entendí... q sucedía? quién era el asesino? 🤣
Sorprendente y maravilloso relato en el que por una vez la lógica se impone a lo extraño.Mucha calidad en todos los relatos que nos ofreces. Gracias una vez más Jota.
Muy buen cuento. Creo recordar que fue el primero que hiciste de Marcelo, ¿no? En todo caso, es una maravilla. Es una buena idea rescatar las viejas historias que se quedaron en el otro podcast. Un abrazo fuerte.
Buena idea Arrakis. Por si alguien no las ha escuchado soy una pequeña relación de esas historias: Ella, El pugio, Azucar y chocolate, Lo esencial es invisible a los ojos, De náufragos y sirenas, El beso de amonet, El faraón desconocido, Vic y los falsos recuerdos etc etc etc. Son los que se me han venido a la memoria así que perdón por los olvidados. Vamos relateros, decid algo al respecto, porque estáis atontaos con tanto confinamiento.
Irune, esto también va por ti.
Jota, acabo de dar una vuelta por "El club del relato". Una buena idea la de traerte aquí esas historias porque hay verdaderas joyas. El Club ... ya tiene más de un año y he disfrutado mucho releyendo aquellos primeros comentarios. Creo que hay que darle un empujón al Club ..., hay que animar a la gente a participar pero haciéndolo desde aquí, desde "Cuentos y relatos" por el gran alcance que tiene este podcast. Comenzaré yo: " Por favor relateros si teneis algo escrito en algún cajón olvidado o habéis sentido alguna vez las ganas de "juntar unas cuantas palabras" para ver si quedaban bien, no lo dudes y enviaselo a Jota que el te lo va a vestir estupendamente y así de paso nos dais una alegría a los que circulamos por este lugar a la caza y captura. Nada de vergüenza ni miedo o es que hay algo que perder. Ahora tenemos más tiempo así que vamos a combatir al "bicho" con buenas palabras. Gracias por leer mi rollo, solo pretendo animar. Saludos relateros de todo el mundo y cuidaos.
Claro qué lo habíamos oído, pero me ha encantado volverlo a oir. Cómo llevamos el encierro? Yo he empezado a salir a un hermoso parque al lado de mi casa, era donde veraneaba Franco cuando venía a Donostia. Ahora es para gozo y disfrute de los donostiarras. Un cariñoso saludo para Jota y todos los oyentes. Cuidaros
Muchas gracias jota por reeditar mi relato. Un gusto y un renovado agradecimiento
Ya había montado en santa cólera por el aparente plagio hasta que vi que es la reposición de un relato antes publicado.
A mi también me sonaba y el recuerdo era positivo. Me ha gustado nuevamente. Me recordó a Cortazar pero en el buen sentido, es decir, nada de conejitos sorpresa. Los muebles estaban confinados, como nosotros, desde hace tiempo y lógicamente querían salir a pasear dentro de sus posibilidades. Estoy de acuerdo en que ¡hay que tenerles paciencia!. Gracias Mercelo y Jota fue cortito pero muy agradable. Saludos relateros confinados y a medio confinar. ¡Que cruz!.