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Comentarios
Lo que voy a decir a continuación no tiene que ver con este podcast en concreto. Me refiero a una serie de defectos comunes que he encontrado en diversos pods de Primum Gradus. Ya sé que hay infinitos programas de historia y que me pueden decir: "si no te gusta, vete a otro y no nos des el coñazo". Sé que tengo esa opción, pero me gusta Primum Gradus y preferiría seguir escuchándolo. O sea, que voy con buena voluntad. Un podcast que, en principio, podría ser muy interesante, puede convertirse en una tortura odiosa si no se cuidan algunas cosas. Especialmente, si no se evita que el sonido sea zarrapastroso. Por ejemplo, si una o varias voces se pierden continuamente porque los que hablan no le hablan al micrófono, sino que le hablan a otro interlocutor, o a una ventana, o vaya ud. a saber a qué le hablan. Es este caso, uno va subiendo el volumen para poder escuchar algo, hasta que uno de los hablantes decide hablarle al micrófono y de pronto te da una soberana patada en el tímpano por el enorme volumen que te ataca. Otra de las putadas es el exceso de música. La obsesión del podcaster porque continuamente suene una musiquilla de mierda que no solo no añade nada sino que molesta. Y molesta mucho más cuando de pronto empieza a atacarte con un volumen muy superior al de lo hablado. En fín, cosas como estas son lo que yo llamo un sonido zarrapastroso. Si los podcasts se hacen para ser escuchados, lo normal sería cuidar el sonido o, por lo menos, intentar no molestar con el sonido.