Manuel Pérez Merino, el Cantor del Grijalva
“Villahermosa
te vistió de fiesta la naturaleza
son tus tardes remansos tranquilos
de rara belleza”
Manuel Pérez Merino, el Cantor del Grijalva, nació el 26 de febrero de 1918, en Villahermosa, Tabasco. Vamos a recordar a este “compositor, genio y gran artista tabasqueño”, así lo definió Thomas Stanford, Etnomusicólogo de trascendencia nacional quien realizó una recopilación de todo el acervo musical del compositor trabajando de la mano de don Manuel. Aquí su testimonio:
“Conocí a don Manuel Pérez Merino en 1987. Su casa se encontraba frente al hotel donde me hospedaba entonces, cuando trabajaba como investigador en el Instituto de Cultura de Tabasco y estaba a cargo de los procesos electrónicos de catalogación en las bibliotecas del estado. Con don Manuel podía platicar de música como platicamos los que somos de conservatorio. Decía que tenía 69 años –nació por ahí de 1918– y que había iniciado sus estudios en Villahermosa; que en la década de 1930 se trasladó a la ciudad de México para estudiar en el Conservatorio Nacional, pero como no tenía sus papeles en orden, fue rechazado; sin embargo, esto no le impidió estudiar con un maestro del Conservatorio y se las arregló para pagar las clases. En breve, empezó a tocar en los clubes nocturnos de las calles de Bucareli, y después en los estudios de la XEW y la XEQ, donde inició su carrera profesional como músico.
De vuelta a su natal Villahermosa –contaba don Manuel– no volvió al centro del país sino de vez en cuando para grabar discos. Aquí fue donde comenzó su carrera como compositor, dedicando gran parte de su inspiración a los pueblos y grandes ríos de Tabasco.
Al escuchar las grabaciones de Manuel Pérez Merino se aprecian de inmediato la diversidad de estilos, texturas y ritmos. Brilla la presencia caribeña en las cadencias de acorde repetido. Es el único pianista que conozco que ha logrado captar todo el sabor del ritmo de un son, como en los dos zapateos Huimanguillo y Tacotalpa, población que reconoció el trabajo y la vocación del compositor distinguiéndolo con el título de “ciudadano honorario”. “Ríos que me hicieron soñar horas de mi infancia lejana, tiempo que nunca volverá.
Don Manuel Pérez Merino, el cantor del Grijalva, murió el 12 de mayo de 1993. Me hubiera gustado brindar en vida este modesto reconocimiento al compositor, como una muestra de afecto al genio de este gran artista tabasqueño. Sea este testimonio musical el homenaje póstumo que le rinde uno de sus muchos admiradores.”
Thomas Stanford.
Etnomusicólogo de carrera, compiló un acervo con más de cinco mil grabaciones musicales de campo con música tradicional mexicana, además de haber producido intensas y originales investigaciones sobre el folclor mexicano en todo el territorio mexicano.
TALENTO MUSICAL
Es evidente que la influencia de la música afrocaribeña en Tabasco ha sido contundente como fuente de inspiración para muchos compositores, tanto de creatividad popular como músicos formados en academia. Es el caso de Manuel Pérez Merino, quien exploró diversos senderos de esa música recreándola con la sensibilidad propia de los tabasqueños, mediante boleros, pasillos colombianos, chachachás, etc. Sin embargo, Manuel Pérez Merino no se limitó a la mera recreación de los géneros musicales, también fue un innovador, un atinado e inteligente lector de las afinidades populares: incorporó a su obra las técnicas del jazz y del blues –tan próximos a las raíces caribeñas–, y supo interpretar el gusto de su gente, de Tabasco, a quien dedicó la mayoría de sus composiciones.
Manuel Pérez Merino representa una generación de músicos formados académicamente, aquellos que volvieron la mirada hacia las fuentes inagotables de la tradición popular y compusieron refinadas piezas musicales y, en este sentido, incidieron en la continuidad de una parte primordial de la cultura –como es la música– al demostrar que no importan tiempo ni recursos en la creación musical, pues lo importante es perdurar.
A este autor tabasqueño se le reconocen más de 100 canciones dedicadas a engrandecer la belleza de su tierra. Su música fue tocada por conjuntos y cantantes de prestigio nacional, podemos mencionar a Antonio Aguilar, Dora María, Marco Antonio Muñiz, el trio Los Panchos, también fue el primer artista con el que se inauguró la Comisión de Radio y Televisión de Tabasco (CORAT)
Entre las canciones más conocidas y románticas de Pérez Merino podemos encontrar: “Provinciana”, “Villahermosa”, “Luna sobre el Grijalva”, “Comalcalco”, “Tacotalpa”, “Camino de Frontera”, “Canción del Usumacinta”, “Adiós a Villahermosa”, “Corrido de Jalapa “Al partir”, “Si supieras”, “Ayúdame a olvidar”, “Ironía” y “Falsedad”, por mencionar tan solo algunas de la extensa lista de canciones del escritor y compositor.
En su honor el 12 de mayo de 1993, en el aniversario de su muerte, la calle donde está ubicada su casa lleva el nombre de: “Calle Manuel Pérez Merino”, en la ciudad de Villahermosa. De igual manera en su honor se fundó “La Casa de la Trova Tabasqueña Manuel Pérez Merino", ubicada en la Zona CICOM y está abierta para compositores e intérpretes tabasqueños como un espacio de expresión y encuentro.
Referencia:
https://detabascosoy.com/tabasco/manuel-perez-merino/
www.rumbonuevo.com.mx
http://macuala.blogspot.com/
Créditos del audio
Guion: Área Creativa del CECOM (Centro de Comunicación)
Locución: Mayra Salmerón.
Corrección de estilo: Aurora Palafox León, Xchel Aurora P. Palafox.
Logística en redes y apoyo técnico: Jairo León Perez Palafox.
Realización: Juan Manuel Pérez Guzmán para radio UJAT 107.3 F. M. de la Universidad Juárez Autónoma de Tabasco.
Comentarios
Precioso.